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RECONOCIMIENTO AL ESFUERZO: GRACIAS FUNDACIÓN

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Por Rodrigo Rieder  Hace algunos años regresé a mi tierra desde Apartadó y Barranquilla. En esas dos ciudades aprendí a narrar futbol en el Darién y a hacer cabina en Emisoras Unidas donde me había encontrado con Electo Gil Bustamante como director; trabajé con un juicio de enamorado de la profesión hasta que llegué a Codazzi; ahí estaba mi hermano Mauricio, Pedro Lara Castiblanco y Ley Martin como jefe. Esa vez no me vinculé a la radio; hice otras cosas que la política me había guardado; luego fui a Valledupar a Ondas de Macondo tras la invitación de Inés   Campo de Mejía y tomé carrera, fui a Puerto Rico y me hice fotógrafo en las playas de Ponce y Bayamón,   luego volví a Codazzi a dirigir Radio Perijá hasta que me fui a Bogotá donde obtuve mi licencia de locutor y mi tarjeta profesional después de dos años alternando en “ La Voz de la Víctor” y la Universidad de la Sabana. Ya en 1968 durante la celebración del primer Festival Vallenato había hecho pininos con Electo y Amílcar A
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SUPERULTRAREQUETEPENTACHACHO: TOMAS “EL NEGRO OVALLE”, HIJO DEL MAGIRIAIMO Por Rodrigo Rieder Durán “No se tu nombre: el sábado eras Miriam, ayer te llamabas Nerys, y en la mañana te nombraban  por la cerca con el nombre de Niriam” Así cantaba Celedón, un músico codesence que sabía ejecutar el saxofón, la flauta y la trompeta cada vez que pasaba la niña estudiante al regresar del colegio por la puerta de su casa, donde él desde un piso cuadrado que hacía las veces de terraza descubierta  podía sonreír  con su vecina joven, a la cual admiraba de manera sana, más nunca le  cantó a su hermana mayor a quien llamaban “La Pura”. Estaba sentado en una banqueta de madera tratando de meter dos ruedas  frutas de una ceiba asemejadas a la llanta de un tractor en un eje de madera y así luego obtener  un rústico y pequeño carrito que con una orqueta de totumo empujaba por todo el patio de su casa El Negro fue su apodo desde cuando Isabel Felicia su madre lo trajo al mundo, Tomás tie

PROGRAMA DE RODRIGO RIEDER DURAN

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GUACOCHITO

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VIDEO DE MERENGUE VALLENATO PARRANDERO

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PRONGAMOSA, LECHE Y SANCOCHO Por Rodrigo Rieder Ese día llovía copiosamente en las sabanas de Minquillo, dormía en una hamaca colgada sobre dos puntales de Guayacán y el pajizo techo dejaba escapar una gotera que se pulverizaba al chocar con las tirantas atravesadas sobre mi cabeza dando la sensación que estaba en una suite con aire acondicionado tras el frio y la humedad que me causaba el roció que llegaba a mi cuerpo. Me levanté y fui a sentarme en un tronco de madera adaptado como asiento al escuchar el bramido de las vacas que ordeñaba Luis Antonio García, esposo de una hermana de mamá llamada Rosa Romero, tía fallecida; corrían los tiempos de Semana Santa y había ido con mi compadre Marcelino Rodríguez a pasar esos días de acogimiento al lugar más tranquilo que se nos vino a la mente y salimos para Verdecia. Ahí estábamos, durmiendo en hamacas el uno al lado del otro, escuchando el  cantar de los pájaros cucaracheros que nadie les pone cuidado, pero que tienen un canto va

MUJERES OJO CON LAS CIRUGÍAS PLÁSTICAS

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Por Rodrigo Rieder He tratado de entender a las mujeres toda una vida, pero me doy por vencido cuando recuerdo una frase que me dijo un veterano (Laureano Collazos Sanín): “A las mujeres no trates de entenderlas, a ellas solo hay que quererlas”. Cuando noto que una mujer no se quiere a sí misma, entonces trato de quererla yo. A veces ellas se confunden y creyendo quererse tratan de modificar sus cuerpos con operaciones quirúrgicas que luego pasan a ser unas pesadillas durante el resto de sus vidas. Es que el cuerpo no resiste a esa transformaciones y comienza a buscar alternativas que traen como consecuencia incomodidades, dolores, tensión de músculos, deformación de células y miles de cosas más. Tan hermosas como son las hembras al natural, una mejilla tersa aun con arugas es deliciosa al contacto; una nalg flácida y tibia no es desagradable acariciarla; también los flácidos brazos de un cincuentona dan apretujones deliciosos y quien dijo que unos labios de mujer madura no saben besa